Para quienes suponen la desaparición de las impresoras tradicionales en razón a un futuro sin papel y de la sinsalida de estos periféricos, ha de sorprenderlos su evolución. Un paso importante es la tinta de sublimación para la impresión de objetos como vasos, lapiceros y demás objetos no planos; sin embargo, el salto real son las impresoras 3D, capaces de hacer realidad cualquier proyecto, eliminando el concepto de imagen y promoviendo el de prototipo.
Su origen se da en los años 90 del siglo pasado en el Massachusetts Institute of Technology "MIT", a través de la empresa ZCorp; para hacerlo posible se utiliza un programa CAD donde se diseña el proyecto, este por supuesto es conectado a la impresora que de imnediato reconoce y construye por capas elementos tan perfectos y nítidos para dejar boquiabierto a cualquiera.
Aquí otra explicación de como funciona una, con velocidad aumentada.
Con estos nuevos dispositivos, no tan fáciles de adquirir aún en el hogar, es hora de comenzar a decirle adiós a las maquetas y proyectos manuales, porque todo estará a un clic, que pereza. Se plantea que en el futuro las factorías estarán constituidas por impresoras gigantescas que emplearán diversos materiales, algo así como una nueva alquimia, otra revolución industrial, la impresión de un mundo real.
Para una mejor idea es bueno leer el artículo de la revista Semana: Impreso en 3D
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Su origen se da en los años 90 del siglo pasado en el Massachusetts Institute of Technology "MIT", a través de la empresa ZCorp; para hacerlo posible se utiliza un programa CAD donde se diseña el proyecto, este por supuesto es conectado a la impresora que de imnediato reconoce y construye por capas elementos tan perfectos y nítidos para dejar boquiabierto a cualquiera.
Aquí otra explicación de como funciona una, con velocidad aumentada.
Con estos nuevos dispositivos, no tan fáciles de adquirir aún en el hogar, es hora de comenzar a decirle adiós a las maquetas y proyectos manuales, porque todo estará a un clic, que pereza. Se plantea que en el futuro las factorías estarán constituidas por impresoras gigantescas que emplearán diversos materiales, algo así como una nueva alquimia, otra revolución industrial, la impresión de un mundo real.
Para una mejor idea es bueno leer el artículo de la revista Semana: Impreso en 3D
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